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Actas Urol Esp. 2015;39(9):573-581

Regis L1, Planas J2, Celma A2, de Torres IM3, Ferrer R4, Morote J5.

1Servicio de Urología, Hospital Universitario Vall d’Hebron, Barcelona, España

1Unidad Institut de Recerca Vall d’Hebron, Hospital Universitari Vall d’Hebron, Barcelona, España

3Servicio de Anatomía Patológica, Hospital Universitario Vall H ́ebron, Barcelona, España

4Servicio de Bioquímica, Hospital Universitario Vall d´Hebron, Barcelona, España

5Departamento de Cirugía, Universidad Autónoma de Barcelona, Barcelona, España

 Resumen

Contexto:

La testosterona en suero está unida mayoritariamente a la hormona transportadora de esteroides sexuales y a la albúmina, existiendo una pequeña parte metabólicamente activa en forma de testosterona libre (TL). La relación entre los niveles séricos de testosterona total (TT) y la carcinogénesis prostática es controvertida. Nuestra hipótesis es que la concentración de TL en suero se relacionaría mejor que la de TT con el riesgo de cáncer de próstata (CP) y su agresividad.

Objetivo:

Analizar la evidencia científica que ha relacionado los niveles séricos de TT y/o TL con el diagnóstico de CP y su agresividad.

Adquisición de la evidencia: Se ha realizado una revisión sistemática en PubMed hasta enero de 2015, utilizando los términos MeSH: prostate cancer, sex hormone, androgen, testosterone, free testosterone.

Síntesis de la evidencia:

Se encontraron 460 publicaciones, de las cuales se han revisado 124 para analizar la evidencia. La relación entre niveles séricos de TT y el diagnóstico de CP y su agresividad es muy heterogénea. La variabilidad en el disenño de los estudios, en los métodos de cuantificación y otras variables puede justificar esta heterogeneidad. En algunos estudios en los que se ha evaluado la TL calculada o determinada la evidencia sigue siendo igualmente contradictoria.

Conclusiones:

La evidencia actual no permite recomendar la determinación sérica de TT y/o TL en el proceso diagnóstico del CP ni en la evaluación de su agresividad.

PALABRAS CLAVE

Cáncer de próstata; Diagnóstico; Agresividad; Andrógenos; Testosterona; Testosterona libre

PMID: 25944770

Comentario editorial: Diversos trabajos han estudiado la relación entre el riesgo de cáncer de próstata (CaP) y testosterona (T). Existen varias teorias al respecto entre las que se incluyen; la hipótesis androgénica que sugiere que a más T mayor probabilidad de CaP y mayor agresividad, la hipótesis por la cual la agresividad se relacionaría con niveles extremos (altos y bajos) de T o la hipótesis basada en el modelo de saturación por la que se defiende que la T sólo influiría en el riesgo y agresividad del CaP cuando está por debajo de un determinado nivel. La intención de los autores de este estudio es realizar una revisión sistemática de la literatura para conocer la relación que existe entre los niveles séricos de T total y/o T libre y el riesgo de CaP y su agresividad. Encuentran que los datos publicados son muy contradictorios y no pueden decantarse por ninguna de las hipótesis previas de manera que no recomiendan la determinación de T total y/o T libre para establecer el riesgo de CaP y poder tomar decisiones sobre necesidad de biopsias o rebiopsias y/o estimar la agresividad del tumor.

José María Lozano-Blasco

Urólogo. FECSM

Adjunto de las Unidades de Andrología y Neuro-urología

UGC de Urología-Nefrología

HHUU Virgen del Rocío. Sevilla

jmlozanoblasco@gmail.com

J Sex Med. 2015 septiembre; 12 (9): 1897-904.

Sanders SA1,2,3, Colina BJ1,4, Janssen E1,5, Graham CA1,2,6, Crosby RA1,2,7, Milhausen RR1,2,8, Yarber WL1,2,3,9.

Información del autor

1El Instituto Kinsey para la Investigación en Sexo, Género y Reproducción de la Universidad de Indiana, Bloomington, IL, EE.UU..

2 Departamento de Estudios de Género, Universidad de Indiana, Bloomington, IL, EE.UU..

3Centro rural para el SIDA / Prevención de ETS, Universidad de Indiana, Bloomington, IL, EE.UU..

4Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Universidad de Chicago, Chicago, IL, EE.UU..

5Instituto para Estudios de la Familia y Sexualidad, Departamento de Neurociencias, Universidad Católica de Lovaina, Lovaina, Bélgica.

6Departmento de Psicología de la Universidad de Southampton, Southampton, Reino Unido.

7Departmento del Comportamiento de la Salud de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Kentucky, Lexington, KY, EE.UU..

8Departmento de Relaciones de Familia y Nutrición Aplicada de la Universidad de Guelph, Ontario, Canadá.

9Departmento de Ciencias Aplicadas de la Salud, Escuela de Salud Pública de la Universidad de Indiana, Bloomington, IL, EE.UU..

Resumen

INTRODUCCIÓN:

Los problemas de erección asociados al condón (PEAC) son un factor subestimado en relación con el uso inconsistente o incompleto del condón masculino. Los mecanismos subyacentes del PEAC no se comprenden, y no se ha estudiado si los hombres que informan de estas dificultades también son propensos a experimentar problemas de erección en situaciones en las que no se utilizan preservativos.

OBJETIVO:

El objetivo del estudio fue investigar, en una muestra de hombres jovenes heterosexuales que utilizan preservativos (edad 18-24 años), si es más probable que los hombres con PEAC (i) tengan problemas de erección cuando no estén utilizando condones y (ii ) que cumplan con los criterios para disfunción eréctil.

MÉTODOS:

Un total de 479 hombres reclutados online completaron el Índice Internacional de Función Eréctil (IIEF-5) y respondieron a las preguntas sobre los problemas de erección que experimentaron al usar y no usar condones durante los últimos 90 días. Se investigaron las variables demográficas, experiencia sexual y estado de salud.

PRINCIPALES MEDIDAS DE RESULTADO:

La percepción subjetiva de la frecuencia de pérdida de erección durante la colocación del condón o durante el coito pene-vaginal (CPV) en los últimos 90 días y la puntuación del IIEF-5.

RESULTADOS:

De los hombres, el 38,4% fueron clasificados en el grupo sin PEAC, el 13,8% tenían PEAC durante la colocación del preservativo, el 15,7% PEAC durante el CPV, y el 32,2% PEAC tanto durante la colocación del condón como durante el CPV. Los hombres que informaron de cualquier forma de PEAC fueron significativamente más propensos a presentar también problemas de erección durante la actividad sexual cuando no usan condones, que los hombres que no informaban de PEAC. Los hombres que refirieron tener PEAC sólo durante la colocación del condón o tambien durante el CPV puntuaron más bajo significativamente en el IIEF-5 que los hombres sin PEAC.

CONCLUSIÓN:

Los hallazgos sugieren que los hombres que refieren PEAC también son más propensos a experimentar más problemas de erección generalizados. Los médicos deberían evaluar si los hombres que usan condones experimentan PEAC y, cuando sea apropiado, derivarlos para recibir terapia psicosexual o proporcionar formación para el uso de los condones.

PALABRAS CLAVE:

Problemas de erección asociado al condón; Condones; Condones para coito pene-vaginal; Excitación Sexual

PMID: 26279414

Comentario editorial: Estudios previos han mostrado que en determinados pacientes los problemas de erección se pueden vincular al uso del condón, si bien en muchos de estos trabajos no se consideraron otras condiciones potenciales, como la posibilidad de que los hombres se colocaran los preservativos de forma erronea o también cuestiones psicológicas. En este trabajo sus autores pretenden valorar si los pacientes que informan de estas dificultades también son propensos a experimentar problemas de erección en situaciones en las que no utilizan preservativos y encuentran que aquellos que refieren problemas de erección asociados al condón también son más propensos a experimentar problemas de erección de forma generalizadas. Además recomiendan valorar a estos pacientes por si se pudieran beneficiar de recibir terapia psicosexual y/o formación para el correcto uso del preservativo.

José María Lozano-Blasco

Urólogo. FECSM

Adjunto de las Unidades de Andrología y Neuro-urología

UGC de Urología-Nefrología

HHUU Virgen del Rocío. Sevilla

jmlozanoblasco@gmail.com

Habous M1, Muir G2, Tealab A3, B4 Williamson, Elkhouly M1, Elhadek W1, Mahmoud S1, Labán O5, Binsaleh S6, Abdelwahab O7, Mulhall JP8, Veale D9.

J Sex Med. 2015 Oct; 12 (10): 2031-5.

Información del autor

1Departamento de Urología y Andrología, Centros Médicos Elaj, Jeddah, KSA.

2Departamento de Urología, Kings College, Londres, Reino Unido.

3Departamento de Urología, Universidad de Zagazig, Zagazig, Egipto.

4Hospitales Universitarios de Birmingham, Birmingham, Reino Unido.

5Hospital King Khaled, Tabouk, KSA.

6Division de Urología del Departamento de Cirugía de la Facultad de Medicina de la Universidad Rey Saud, Riad, Reino de Arabia Saudita.

7Departamento de Urología, Universidad de Benha, Benha, Egipto.

8Programa de Medicina Sexual y Reproductiva, Memorial Sloan Kettering Cancer, Nueva York, NY, EE.UU..

9Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia, Kings College de Londres, Reino Unido.

Resumen

INTRODUCCIÓN:

Muchos hombres buscan tratamientos para aumentar el tamaño del pene, una herramienta estándar para aconsejarles es informarles de lo que es "normal". Aunque algunos estudios sugieren una buena correlación entre la longitud del pene estirado y la longitud del pene en erección, aquellos en los que se han medido ambas longitudes simultaneamente han mostrado una variabilidad significativa.

OBJETIVO:

Evaluar con precisión las diferentes mediciones del pene con múltiples observadores.

MÉTODOS:

Se reclutaron 201 hombres adultos (edad media 49,6 años) que alcanzaron una erección completa mediante inyección intracavernosa.

PRINCIPALES MEDIDAS DE RESULTADO:

Las mediciones del pene se tomaron por uno de los siete especialistas andrología en un ambiente privado, con temperatura controlada (21 ° C, 72 ° F). Se midieron la longitud y la circunferencia del pene flacido estirado y del pene erecto. Se analizó la precisión de cada medición flácida usando las medidas en erección como referencia, para la población total de pacientes y para cada observador.

RESULTADOS:

La subestimación media de la longitud de pene flácido estirado y el pene erecto fue 2,64 cm (21,4%) y la circunferencia de 2,27 cm (19,5%). La variabilidad interobservador osciló entre una subestimación media de 16-27% (longitud) y 15-27% (circunferencia).

CONCLUSIONES:

En este gran estudio multicéntrico, multi-observador del tamaño del pene, las mediciones del pene flácido subestiman el tamaño del pene erecto. También parece probable que existe una variabilidad interobservador significativa. Creemos que en hombres en los que se está considerando el tratamiento de la ansiedad por pene pequeño debe utilizarse la medición del pene en erección.

PALABRAS CLAVE:

Errores interobservador; Metodología; Medición Tamaño del pene; Subestimar

PMID: 26440678

Comentario editorial: Los pacientes que solicitan información o exigen un tratamiento en relación al tamaño del pene son frecuentes en las consulta de Andrología. En este interesante trabajo sus autores abogan por la información al paciente sobre lo que se puede considerar un tamaño normal como punto inicial del manejo de estos casos. Según sus resultados medir el pene en flacidez subestima la medida del pene erecto y por esta razón recomiendan que la medición en este tipo de pacientes se realice en erección.

José María Lozano-Blasco

Urólogo. FECSM

Adjunto de las Unidades de Andrología y Neuro-urología

UGC de Urología-Nefrología

HHUU Virgen del Rocío. Sevilla

jmlozanoblasco@gmail.com

J Urol. 2015 Nov; 194 (5): 1271-6.

Pastuszak AW1, Khanna A2, Badhiwala N3, Morgentaler A4, Hult M4, Conners WP4, Sarosdy MF5, Yang C6, Carrión R6, Lipshultz LI1, Khera M7.

Información del autor

1Centro de Medicina Reproductiva, Baylor College of Medicine, Houston, Texas.

2Servicio de Urología Scott, Baylor College of Medicine, Houston, Texas.

3Servicio de Urología de la Universidad de Washington en St. Louis, St. Louis, Illinois.

4Escuela de Medicina de Harvard, Boston, Massachusetts.

5Urología y Oncología Urológica South Texas, San Antonio, Texas.

6Servicio de Urología de la Universidad del Sur de Florida Morsani College of Medicine, Tampa, Florida.

7Servicio de Urología Scott, Baylor College of Medicine, Houston, Texas.

Dirección electrónica: mkhera@bcm.edu.

Resumen

PROPÓSITO:

Existe poca literatura sobre la seguridad del tratamiento con testosterona en hombres tratados por cáncer de próstata. Presentamos los datos multi-institucionales sobre terapia con testosterona en hombres hipogonádicos tratados por cáncer de próstata con radioterapia.

MATERIALES Y METODOS:

Se revisaron retrospectivamente los registros de los hombres hipogonádicos tratados con testosterona después del tratamiento con radioterapia para el cáncer de próstata en 4 instituciones. Se analizaron la testosterona sérica, testosterona libre, estradiol, globilina fijadora de hormonas sexuales, el antígeno prostático específico, la velocidad del antígeno prostático específico y los resultados de la biopsia de próstata.

RESULTADOS:

Un total de 98 hombres fueron tratados con radioterapia. La mediana de edad fue de 70,0 años (rango 63,0-74,3) al inicio del tratamiento con testosterona. La testosterona basal media fue de 209 ng / dl (rango 152-263) y el antígeno prostático específico basal medio fue de 0,08 ng / ml (rango 0,00-0,33). La puntuación de Gleason fue de 5 en 3 hombres (3,1%), 6 en 44 (44,9%), 7 en 28 (28,6%), 8 en 7 (7,1%) y 9 en 4 (4,1%). La mediana de seguimiento fue de 40,8 meses (rango 1,5 a 147). La testosterona sérica aumentó a una media de 420 ng / dl (rango 231-711) durante el seguimiento (p <0,001). En general, se observó un aumento no significativo en el antígeno prostático específico medio desde 0,08 ng / ml al inicio del estudio a 0,09 ng / ml (p = 0,05). Entre los pacientes del alto riesgo el antígeno prostático específico aumentó de 0,10 a 0,36 ng / ml (p = 0,018). Seis hombres (6,1%) cumplieron con los criterios de recidiva bioquímica.

CONCLUSIONES:

El tratamiento con testosterona en hombres tras radioterapia para el cáncer de próstata se asoció con un pequeño aumento en el antígeno prostático específico en suero y una baja tasa de recidiva bioquímica.

PALABRAS CLAVE:

Terapia de sustitución hormonal; prostatectomía; neoplasias prostáticas; radioterapia; testosterona

Comentario editorial: Existe mucha controversia en relación al tratamiento con testosterona de aquellos hombres con clínica de hipogonadismo e historia de cáncer de próstata (CaP). Durante décadas se ha asumido que niveles altos de testosterona producen un crecimiento acelerado del CaP, que estos niveles altos aumentan el riesgo de padecer este tumor y que niveles bajos disminuyen el riesgo de padecerlo. Por esta razón el tratamiento sustitutivo con testosterona ha estado absolutamente contraindicado en hombres con antecedentes de CaP. En los últimos años ha habido un cambio en el entendimiento de la relación entre los andrógenos y el CaP. En este estudio sus autores recogen información sobre la evolución de 98 pacientes tratados con testosterona tras radioterapia con un seguimiento medio de 40 meses. Resulta un trabajo muy interesante ya que a pesar de que se ha empezado a plantear la posibilidad de tratar con testosterona a grupos seleccionados de pacientes con historia de CaP, existe aun falta de información sobre la seguridad del tratamiento en esta población.

José María Lozano-Blasco

Urólogo. FECSM

Adjunto de las Unidades de Andrología y Neuro-urología

UGC de Urología-Nefrología

HHUU Virgen del Rocío. Sevilla

jmlozanoblasco@gmail.com

AGOSTO 2015

 J Urol. 2015 Aug; 194 (2): 485-92.

Hellstrom WJ1, Kaminetsky J2, Belkoff LH3, Goldstein I4, Tursi JP5, Uy J5, Peterson CA6, Bowden CH7, Día WW6.

Información del autor

1Escuela Universitaria Tulane de Medicina de Nueva Orleans, Louisiana. Dirección electrónica: whellst@tulane.edu.

2University Urology Associates, Nueva York, Nueva York.

3Consultores Urológicos del Sureste de Pensilvania, Bala Cynwyd, Pennsylvania.

4San Diego Medicina Sexual, Hospital Alvarado, San Diego, California.

5Auxilium Pharmaceuticals, Inc., Chesterbrook, Pensilvania.

6VIVUS, Inc., Mountain View, California.

7Escuela Universitaria de Medicina de Stanford, Stanford, California.

Resumen

PROPÓSITO:

Se examinaron los efectos terapéuticos del Avanafilo a los 15 minutos de la toma en hombres con disfunción eréctil de leve a severa.

MATERIALES Y METODOS:

En este estudio aleatorizado, doble ciego, controlado con placebo, de 12 semanas de duración (4 semanas sin tratamiento y 8 semanas de tratamiento) se aleatorizó 145 hombres a placebo, 147 a Avanafilo 100 mg y 148 a Avanafilo 200 mg a demanda. La variable principal de eficacia fue la proporción de encuentros sexuales por paciente en los que se consiguió una erección suficiente para lograr la penetración vaginal durante el período de tratamiento aproximadamente a los 15 minutos después de la toma de dosis, medido por un cronómetro. El intento tuvo que permitir la finalización con éxito de las relaciones sexuales de acuerdo a la pregunta 3 del cuestionario SEP.

RESULTADOS:

Se observó un porcentaje medio por sujeto significativamente mayor de intentos exitosos de coito dentro de aproximadamente los 15 minutos después de la toma del avanafilo 100 mg (media 25,9%, LS media ± SE 24,7% ± 2,9%) y 200 mg (media 29,1%, LS media de 28,2% ± 2,9%) vs placebo (media de 14,9%, 13,8% LS media de ± 2,9%, p = 0,001 y <0,001, respectivamente). Después del tratamiento observamos una diferencia estadísticamente significativa entre avanafilo y placebo en el promedio de intentos exitosos de coito por paciente según la pregunta 3 del cuestionario SEP ya a los 10 minutos en el grupo de 200 mg y a los 12 minutos en el grupo de 100 mg. Los eventos adversos emergentes tratados incluyeron dolor de cabeza, infección del tracto respiratorio superior y la congestión nasal, y la mayoría de estos eventos fueron leves o moderados en gravedad.

CONCLUSIONES:

Avanafilo fue eficaz a los aproximadamente 15 minutos de la toma de dosis en comparación con el placebo. Se demostró una diferencia estadisticamente significativa del tratamiento frente al placebo en el porcentaje de intentos sexuales satisfactorios tan pronto como a los 10 minutos después del tratamiento.

PALABRAS CLAVE:

avanafilo; ensayos clínicos como tema; coito; disfunción eréctil; inhibidores de la fosfodiesterasa 5

PMID: 25591992

 Comentario editorial: Los inhibidores de la fosfodiesterasa 5 (I-PDE5) han demostrado eficacia y seguridad en el tratamiento de la disfunción eréctil (DE) de manera que se consideran el estándar de tratamiento. Uno de los elementos importantes para el paciente y su pareja a la hora de elegir un determinado I-PDE5 es el tiempo que transcurre desde la toma de la medicación y el momento de la relación. Según la ficha técnica y estudios previos, el avanafilo se absorbe de manera rápida y selectiva, siendo uno de los I-PDE5 indicado para tomar con menor margen de tiempo antes de la actividad sexual. En este estudio fase 4, aleatorizado, doble ciego, controlado con placebo, se demuestra una diferencia estadisticamente significativa a favor de avanafilo, tanto para 100mg como para 200mg, frente al placebo en el porcentaje de intentos sexuales satisfactorios aproximadamente a los 15 minutos de la toma de la dosis.

 José María Lozano-Blasco

Urólogo. FECSM

Adjunto de las Unidades de Andrología y Neuro-urología

UGC de Urología-Nefrología

HHUU Virgen del Rocío. Sevilla

jmlozanoblasco@gmail.com

Eur Urol. 2015 Nov; 68 (5): 750-3.

Gallina A1, Bianchi M1, Gandaglia G1, Cucchiara V1, Suardi N1, Montorsi F1, Briganti A2.

Información del autor

1Division de Oncología / Unidad de Urología, Instituto de Investigación de Urología, IRCCS Ospedale San Raffaele, de Milán, Italia.

2Division de Oncología / Unidad de Urología, Instituto de Investigación de Urología, IRCCS Ospedale San Raffaele, de Milán, Italia. Dirección electrónica: briganti.alberto@hsr.it.

Resumen

Un reciente estudio informó sobre un efecto perjudicial de los inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 (I-PDE5) en la recurrencia bioquímica (RBQ) después de prostatectomía radical (PR) para el cáncer de próstata (CaP). Pusimos a prueba la asociación entre el uso de los I-PDE5, el esquema de tratamiento con IPDE5, el número de pastillas tomadas y la RBQ en 2579 pacientes tratados mediante PR con preservación nerviosa bilateral para CaP entre 2004 y 2013 en un solo centro. Los pacientes fueron clasificados de acuerdo al uso de I-PDE5 dentro de 2 años después de la cirugía como; a demanda, protocolo de rehabilitación (I-PDE5 de uso diario durante al menos 3 meses), y no uso de IPDE5. Los modelos de regresión Cox multivariantes (MVA) testaron la asociación entre los I-PDE5 y la RBQ. Los mismos análisis se repitieron utilizando el número de pastillas de I-PDE5 tomadas por cada paciente. En total, 674 pacientes (26,1%) recibieron I-PDE5. En el análisis MVA, El uso de I-PDE5, el esquema de administración, y el número de pastillas de I-PDE5 no se asociaron significativamente con un mayor riesgo de RBQ (todos p ≥ 0,2) después de considerar varios factores de confusión incluyendo el tiempo desde la PR hasta el uso de los I-PDE5 . A la espera de nuevos estudios, los pacientes no se les debe negar el tratamiento con I-PDE5 despues de la PR.

RESUMEN:

Entre los pacientes tratados mediante prostatectomía radical, el uso de los inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 no se asoció con un mayor riesgo de recidiva bioquímica, independientemente del régimen terapéutico utilizado.

PALABRAS CLAVE:

Recurrencia bioquímica; Tipo de inhibidores de la fosfodiesterasa 5; Cáncer de próstata; Prostatectomía radical

PMID: 25700565

Comentario editorial:

La disfunción eréctil es un efecto secundario común del tratamiento del cáncer de próstata (CaP) y los inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 (I-PDE5) constituyen una primera línea para su manejo. Este trabajo del Instituto de Investigación Urológica de Milán se publica como respuesta a un reciente estudio alemán recogido en Journal of Urology en el que se comunicaba un pequeño, pero significativo aumento del riesgo de recidiva bioquimica entre aquellos pacientes que usan los I-PDE5 en comparación con los que no lo usan. En el trabajo italiano, por el contrario, no se encontró asociación entre el uso de esta medicación y un mayor riesgo de recidiva bioquímica, independientemente del régimen terapéutico utilizado. A pesar de que el número de pacientes incluido este último estudio es menor, incluye información más completa sobre la dosis y la duración del uso de los I-PDE5.

José María Lozano-Blasco

Urólogo. FECSM

Adjunto de las Unidades de Andrología y Neuro-urología

UGC de Urología-Nefrología

HHUU Virgen del Rocío. Sevilla

jmlozanoblasco@gmail.com

Eur Urol. 2015 Oct; 68 (4): 674-80.

Chen L1, Staubli SE1, Schneider MP2, Kessels AG3, Ivic S4, Bachmann LM4, Kessler TM5.

Información del autor

1Neuro-Urology, Spinal Cord Injury Center & Research de la Universidad de Zürich, Hospital Universitario Balgrist, Zürich, Suiza.

2Neuro-Urology, Spinal Cord Injury Center & Research de la Universidad de Zürich, Hospital Universitario Balgrist, Zürich, Suiza; Instituto de Investigación del Cerebro de la Universidad de Zürich, Zürich, Suiza; Departamento de Ciencias de la Salud y Tecnología, Instituto Federal Suizo de Tecnología de Zurich, Zúrich, Suiza.

3Servicio de Anestesiología y Medicina del Dolor, Maastricht University Medical Center, Maastricht, Países Bajos.

4Medignition Research Consultants, Zürich, Suiza.

5Neuro-Urology, Spinal Cord Injury Center & Research de la Universidad de Zürich, Hospital Universitario Balgrist, Zürich, Suiza. Dirección electrónica: tkessler@gmx.ch.

Resumen

CONTEXTO:

La disfunción eréctil (DE) es un importante problema de salud a nivel mundial y los inhibidores de la fosfodiesterasa 5 (I-PDE5) son el tratamiento farmacológico de elección. Sin embargo, no se conoce el I-PDE5 óptimo para el tratamiento de la disfunción eréctil.

OBJETIVO:

Investigar el equilibrio entre la eficacia y los efectos adversos para diversos I-PDE5 en el tratamiento de la disfunción eréctil.

ADQUISICIÓN DE LA EVIDENCIA:

Se realizó una revisión de acuerdo a la Declaración de Puntos de Información Preferidos para Revisiones Sistemáticas y Meta-análisis. Se utilizaron Medline, Scopus, listas de referencias de artículos relevantes y revisiones sistemáticas. Los estudios que se eligieron eran ensayos controlados aleatorios comparando al menos un I-PDE5 para el tratamiento de la disfunción eréctil con placebo u otro I-PDE5.

SÍNTESIS DE LA EVIDENCIA:

Se incluyeron 82 ensayos (47.626 pacientes) para el análisis de la eficacia y 72 ensayos (20.325 pacientes) para el análisis de eventos adversos. En el análisis de ventaja en dosis de inicio, sildenafilo 50mg presentó la mayor eficacia, pero también tenía la mayor tasa de eventos adversos en general. Tadalafilo 10mg tenia eficacia intermedia, pero tuvo la tasa general más baja de eventos adversos. Vardenafilo 10mg y avanafilo 100mg tuvieron eventos adversos en general similares a sildenafilo 50mg pero con una eficacia global notablemente inferior. Udenafilo 100mg presentó una eficacia global similar al tadalafilo de 10mg pero sus tasas generales de eventos adversos fueron mayores.

CONCLUSIONES:

Este es el primer análisis comparativo de los diferentes IPDE5 actualmente disponibles. Para las personas que dan prioridad a la alta eficacia, el sildenafilo 50mg parece ser el tratamiento de elección. Los hombres que deseen optimizar tolerabilidad deberían tomar tadalafilo 10mg o cambiar a udenafilo 100mg en el caso de eficacia insuficiente.

RESUMEN:

Para los pacientes con disfunción eréctil que desean dar prioridad alta eficacia, sildenafilo 50mg parece ser el tratamiento de elección. Los hombres que desean optimizar la tolerabilidad deberían tomar tadalafilo 10mg o cambiar a udenafilo 100mg en el caso de eficacia insuficiente.

PALABRAS CLAVE:

La disfunción eréctil; Metanálisis en red; Inhibidores de la fosfodiesterasa 5

PMID: 25817916

Comentario editorial: No existe el inhibidor de la fosfodiesterasa 5 “ideal” o “perfecto”, sino que la eleccion que se suele hacer a la hora de tratar la disfunción erectil va a depender de multiples factores como son la vida media del fármaco, su eficacia esperada, su perfil de efectos secundarios, el precio, los antecedentes del paciente, sus preferencias… En este interesante y amplio metaanalisis se comparan los datos referentes a eficacia y efectos adversos de los distintos IPDE5, recogidos en numerosos ensayos bien diseñados y que aglutinan a casi 70.000 pacientes. Los resultados que publican pueden ser de gran utilidad a la hora de plantear el tratamiento de la disfunción erectil como un “traje a medida” para nuestro paciente.

José María Lozano-Blasco

Urólogo. FECSM

Adjunto de las Unidades de Andrología y Neuro-urología

UGC de Urología-Nefrología

HHUU Virgen del Rocío. Sevilla

jmlozanoblasco@gmail.com

Lawrence D. Hayes1,2, Nicholas Sculthorpe2, Peter Herbert3, Julien S. Baker2, David A. Hullin4, Liam P. Kilduff5, and Fergal M. Grace2

1School of Human Sciences, London Metropolitan University, London, UK, 2Institute of Clinical Exercise and Health Science, University of the West of Scotland, Hamilton, UK, 3School of Sport, Health and Outdoor Education, Trinity Saint David, University of Wales, Camarthen, UK, 4Department of Clinical Biochemistry, Royal Glamorgan Hospital,Glamorgan, UK, and 5Department of Applied Sports Technology, Exercise and Medicine, Swansea University, Swansea, UK

Aging Male 2015; 18(2): 67–70

RESUMEN

La testosterona (T) es un andrógeno biológicamente importante que muestra una disminución, ampliamente conocida, con la edad. El uso de T en saliva (sal-T), como determinante de la T sistémica, ha mostrado resultados prometedores en los últimos años. Sin embargo, la fuerza la relación T saliva-suero puede verse afectada por el método de medición y la capacidad de unión de la sal-T con
proteínas. La influencia potencial del ejercicio que puede afectar a esta relación está sin estudiar en el envejecimiento. Por lo tanto, el objetivo de la presente investigación fue examinar la relación del cambio delta (Δ) en el sal-T con Δ de la T en suero después de seis semanas de ejercicios de entrenamiento. Quince hombres sedentarios (SED) (edad 60,4 ± 5,0 años) y 20 varones que realizaron ejercicio a lo largo de su vida (LE) (60,4 ± 4,7 años) participaron. El coeficiente de correlación de Pearson reveló sal-T no se correlacionó con testosterona total (TT), la globulina transportadora de hormonas sexuales (SHBG), T bioactivo (bio-T), o libre T
(libre-T) en la semana 0 ó a las 6 semanas. Δ SAL-T no se correlacionó con la Δ TT, Δ SHBG, Δ bio-T o Δ free-T (r=0.271, p=0.180; r=0.197, p=0.335; r=0.258, p=0.205; y r=0.257, p=0.205, respectivamente).
En conclusión, existen bajos niveles de relación entre las mediciones de T en saliva y suero en respuesta al ejercicio entre los hombres de edad avanzada.

Comentario editorial: Puede ser una buena opción para el autocontrol de los niveles de testosterona su medición en saliva. No obstante debemos ser cautos a la hora de valorar estas m

Carlos Balmori Boticario

Urólogo. FECSM

Responsable Sección Urología y Medicina Sexual y Reproductiva

Centros: Hospital Nª Sra. del Rosario. IVI Madrid

cbalmori@unidadmedicinasexual.com

www.unidadmedicinasexual.com

BJU Int 2015 Nov;116(5):815-22

Culley C. Carson III, Hossein Sadeghi-Nejad*, James P. Tursi†, Ted M. Smith†,

Gregory J. Kaufman†, Kimberly Gilbert† and Stanton C. Honig‡

Department of Surgery, University of North Carolina, Chapel Hill, NC, *Rutgers New Jersey Medical School and

Hackensack University Medical Center, Hackensack, NJ, †Auxilium Pharmaceuticals, Chesterbrook, PA, and

‡Department of Urology, Yale University School of Medicine, New Haven, CT, USA

RESUMEN

OBJETIVO:

Examinar la seguridad de la inyección intralesional de Colagenasa de Clostridium Histolyticum (CCH) para el tratamiento de la enfermedad de Peyronie (PD), utilizando un análisis agrupado de seguridad de los pacientes que recibieron al menos una dosis de CCH en cualquiera de los seis estudios clínicos.

PACIENTES Y MÉTODOS:

Los pacientes de seis estudios clínicos, incluyendo tres ensayos aleatorizados, doble ciego, controlados con placebo y tres estudios abiertos de seguridad y eficacia, se incluyeron si habían recibido al menos una dosis de 0,58 mg CCH. Se recogieron los eventos adversos (EA), incluyendo EA derivados del tratamiento, EA relacionados con el tratamiento y EA graves (EAG). Los EA potencialmente relacionados con la inmunogenicidad se evaluaron a través del examen del aumento de los niveles de anticuerpos anti-AUX-II y anti-AUX-I y decribiendo los posiblemente asociados con eventos inmunológicos o de hipersensibilidad.

RESULTADOS:

En general, el 85,8% de los 1 044 pacientes agrupados refirió al menos un EA relacionado con el tratamiento. Los EA relacionados con el tratamiento (≥25.0% de los pacientes) incluyeron hematoma peneano (82,7%), dolor en el pene e inflamación del pene. La mayoría de los pacientes (75,2%) tenían EA relacionados con el tratamiento de severidad leve a moderada, y el 14,2% no tenía EA relacionados con el tratamiento. Nueve pacientes (0,9%) presentaron reacciones adversas graves relacionadas con el tratamiento: cinco con hematoma del pene y cuatro con rotura corporal. No hubo asociación entre EA y anti-AUX-I o los niveles de anticuerpos anti-AUX-II a lo largo de los ciclos de tratamiento, y no se produjeron reacciones de hipersensibilidad sistémicas.

CONCLUSIONES:

Este análisis agrupado de seguridad muestra que aunque los EA no graves y graves relacionados con el tratamiento pueden ocurrir después del tratamiento con CCH para la PD, la mayoría eran no-grave y el EAG eran manejables. Los facultativos que usen este tratamiento deben estar preparados para gestionar posibles reacciones adversas graves.

Comentario editorial: Todavía se hacen necesarios más estudios sobre los modos de aplicación más adecuado, así como los casos en los que se debe usar o no CCH

Carlos Balmori Boticario

Urólogo. FECSM

Responsable Sección Urología y Medicina Sexual y Reproductiva

Centros: Hospital Nª Sra. del Rosario. IVI Madrid

cbalmori@unidadmedicinasexual.com

www.unidadmedicinasexual.com

Fertil Steril. 2015 Oct;104(4):838-844

Luttmer R1, Dijkstra MG2, Snijders PJ1, Jordanova ES2, King AJ3, Pronk DT1, Foresta C4, Garolla A4, Hompes PA2, Berkhof J5, Bleeker MC1, Doorbar J6, Heideman DA1, Meijer CJ7

1Department of Pathology, VU University Medical Center, Amsterdam, the Netherlands.

2Department of Obstetrics and Gynaecology, VU University Medical Center, Amsterdam, the Netherlands.

3Department of the National Immunisation Programme and Virology, Centre for Infectious Disease Research, Diagnostics and Screening, National Institute for Public Health and the Environment (RIVM), Bilthoven, the Netherlands.

4Section of Clinical Pathology and Unit for Human Reproduction Pathology, Department of Medicine, University of Padova, Padova, Italy.

5Department of Epidemiology & Biostatistics, VU University Medical Center, Amsterdam, the Netherlands.

6Department of Pathology, University of Cambridge, Cambridge, United Kingdom.

7Department of Pathology, VU University Medical Center, Amsterdam, the Netherlands. Electronic

RESUMEN

OBJETIVO:
Estudiar el origen del virus del papiloma humano (VPH) en el semen.

DISEÑO:
Estudio observacional (CCMO-NL3248800010).

ESCENARIO:
Laboratorio hospital docente.

PACIENTE (S):
Varones voluntarios sanos (n = 213).

INTERVENCIÓN (S):
Se obtuvieron una muestra de exfoliado de pene y tres de semen por participante, se realizó prueba de ADN del VPH tanto por reacción en cadena de la polimerasa (PCR) GP5+/ 6+ y SPF10-PCR para detectar la carga viral moderada/alta y baja, respectivamente; las lesiones peneanas planas (FPL) se detectaron por penoscopía.
LA VARIABLE PRINCIPAL (S):
Presencia de ADN de VPH en el semen y exfoliado del pene, y la presencia de FPL.

RESULTADO (S):
HPV-DNA con cargas virales moderados/altos (es decir, GP5+/6+ PCR-positivo) se detectó en ≥1 muestra de semen (s) en el 27% de los participantes. La mayoría de los hombres con cargas virales moderados / elevados en el exfoliado del pene también tenían cargas virales moderados / altos en el semen (85%). Los hombres con exfoliado para VPH negativo eran muy poco probable que tengan una carga viral moderada / alta en el semen (3%). La presencia de VPH en el semen se asoció con la presencia de VPH en el exfoliado de pene también a nivel de genotipo específico. Tener FPL era un factor de riesgo para la presencia del VPH en el semen.

CONCLUSIÓN (S):
La presencia de ADN de VPH en el semen de hombres sanos es común y se asocia con infecciones por VPH del epitelio del pene. La presencia de ADN de VPH en el semen puede ser consecuencia de la descamación de las células del pene infectadas por el VPH.

Comentario editorial: Existen numerosos estudios sobre el HPV y la infertilidad. Todavía no hay datos claros sobre esta relación ya que la prevalencia de HPV en los individuos sanos es alta, por lo que habrá que buscar los factores asociados que pueden modificar la fertilidad. Así mismo habrá que seleccionar los pacientes susceptibles de tratamiento para mejorar la fertilidad.

Carlos Balmori Boticario

Urólogo. FECSM

Responsable Sección Urología y Medicina Sexual y Reproductiva

Centros: Hospital Nª Sra. del Rosario. IVI Madrid

cbalmori@unidadmedicinasexual.com

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